Letanía para aceptar la Voluntad de Dios.

Dios mío, Padre mío, ten piedad de mí,

Dios mío, mi Salvador ten piedad de mí

oh Trinidad Santa, ten piedad de mi.

Jesús agonizante en el jardín de los Olivos, mi alma está triste, escúchame.

Jesus que oraste en el Jardín de los Olivos , mi alma está triste, óyeme.

Corazón compasivo de María, consuélame.

Santo Ángel, venido del Cielo para fortalecer a Jesús, ruega por mí.

Dios mío, en la pena en que me encuentro, el corazón enfermo y atormentado por la aflicción que lo oprime, me atrevo a decir con Jesús, Vuestro hijo: «¡Oh Padre, si es posible, que este cáliz se aleje de mí!

Dios mío en el terrible sufrimiento, el corazón en medio de angustias y destrozado por el dolor, me atrevo a deciros con Jesús, Vuestro Hijo: ¡oh Padre, si es posible, que este cáliz se aleje de mí!

Dios mío en esta cruel agonía que padezco entre la naturaleza humana y la gracia, el corazón que desfallece, me atrevo a deciros con Jesús, ¡Vuestro Hijo; ¡oh padre mío si es posible que este cáliz se aleje de mí!

Sin embargo, si no puede pasar se largo sin que yo lo beba, Padre mío, dame la gracia de someterme.

Si este cáliz es necesario y útil a mi salvación, Padre mío, dame la gracia de someterme. Si  para Vuestra gloria, tengo que pasar por esta prueba, Padre mío dame la gracia de someterme.

Jesús agonizante seme propicio.

Por la tristeza mortal de Vuestro Corazón oprimido, Jesús que yo diga con Vos: Padre mío que Vuestra Voluntad sea haga y no la mía.

Por el miedo en que Vuestro Corazón fue acongojado por el pensamiento de los tormentos de la Pasión Jesús que yo diga como Vos:

¡Padre mío que se haga Vuestra Voluntad y no la mía!

Por la tristeza mortal con que Vuestro Corazón estuvo atormentado, Jesús que yo diga como Vos:

¡Padre mío que se haga Vuestra Voluntad y no la mía!

Por vuestra perseverancia en la oración, en medio de las fallas de la naturaleza humana, Jesús que yo diga con Vos:

¡Padre mío que se haga Vuestra Voluntad y no la mía!

Por Vuestra resignación en medio de las crueles angustias, Jesús que yo diga con Vos:

¡Padre mío que se haga Vuestra Voluntad y no la mía!

Por Vuestro Sudor de Sangre que goteaba hasta la tierra, Jesús que yo diga con Vos:

¡Padre mío que se haga Vuestra Voluntad y no la mía!

Por el dolor que habéis sentido cuando encontrasteis a Vuestros apóstoles dormidos, atormentados por la tristeza, Jesús que yo diga con Vos:

¡Padre mío que se haga Vuestra Voluntad y no la mía!

Por la amorosa queja que les dijisteis, Jesús, que yo diga con Vos:

¡Padre mío que se haga Vuestra Voluntad y no la mía!

Por los consuelos que tuvisteis del Angel, Jesús que yo diga con Vos:

¡Padre mío que se haga Vuestra Voluntad y no la mía!

De todo desaliento, líbrame Jesús.

De toda impaciencia, líbrame Jesús.

De toda murmuración líbrame Jesús.

En mis tristezas y mis suspiros asísteme Jesús, te lo suplico.

En mis miedos y mis terrores, asísteme Jesús te lo suplico.

En mis tristezas y mis soledades, asísteme Jesús de lo suplico.

En mis angustias y mis soledades, asísteme Jesús de lo suplico.

En todas mi agonías, asísteme Jesús te lo suplico.

Cordero de Dios que quita los pecados del mundo, sálvame Jesús.

Cordero de Dios que quita los pecados del mundo,escúchame Jesús.

Cordero de Dios que quitas los pecado del mundo tened piedad de mí, Jesús.

Corazón de Jesús, triste hasta la muerte fortaléceme.

Corazón de Jesús, triste hasta la muerte consuélame.

Oremos.

Oh Dios mío que que golpeas y curas, que vuelves a golpear para curarnos otra vez, no permitas que sea vencido por el mal que me persigue. Si no es posible que pase de largo, dad a mi alma más fuerza, paciencia y sumisión: porque jamás rechazáis aquellos que os lo piden en nombre y por los méritos de Vuestro Hijo que agonizaba resignado en el Jardin de los Olivos Nuestro Señor Jesucristo que vive y reina con Vos en la unidad del Espiritu Santo por los siglos de los siglos.  Amén.

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