Testimonio: Personal médico explica cómo los bebés que sobreviven al aborto son asesinados o abandonados a su suerte

El niño nació vivo y para impedirle gritar, el médico rápidamente cubrió su rostro. Luego lo llevó a otra habitación… No vi ningún defecto en él, luchó para respirar e hizo algunos gestos leves. Estaba completamente formado, tenía pestañas, pelo, uñas… El doctor se acercó y preguntó si aún estaba respirando; de ser así, dijo que le administraría una inyección para «solucionar el problema». Cinco minutos después, regresó y tomó una jeringa… Entonces la insertó directamente en el corazón del bebé… El niño, durante la inyección, movió todos sus miembros. No sé qué quería decir, pero quizás que estaba sufriendo.

Por Sarah Terzo (LiveActionNews) – traducido por www. catolicasmexico.com

En los Estados Unidos, los bebés que accidentalmente nacen vivos durante un aborto están protegidos por una ley que requiere que el personal abortista y los hospitales les brinden atención médica. Sin embargo, Live Action descubrió a través de investigaciones secretas, que muchos abortistas ignoran esta ley.

El Centro Europeo por los Derechos Constitucionales y Humanos, que promueve legislaciones para proteger a estos niños y niñas, también ha recopilado evidencia de enfermeras y parteras sobre los casos similares en Europa.

MK, una estudiante de enfermería en Francia cuenta esta historia:

El niño nació vivo y para impedirle gritar, el médico rápidamente cubrió su rostro. Luego lo llevó a otra habitación… No vi ningún defecto en él, luchó para respirar e hizo algunos gestos leves. Estaba completamente formado, tenía pestañas, pelo, uñas… El doctor se acercó y preguntó si aún estaba respirando; de ser así, dijo que le administraría una inyección para «solucionar el problema». Cinco minutos después, regresó y tomó una jeringa… Entonces la insertó directamente en el corazón del bebé… El niño, durante la inyección, movió todos sus miembros. No sé qué quería decir, pero quizás que estaba sufriendo. El niño vivió solo un cuarto de hora. El equipo médico dijo a los padres del niño que había salido muerto. Por esta razón no queríamos que el niño llorase al nacer: hubiese sido demasiado traumático para ellos. Lo que personalmente me impresionó, fue la sangre fría médico (el jefe del Departamento) al inyectar el corazón del niño. El hecho de que el niño naciese vivo era un problema que tenía que resolverse: nunca se consideró informar a los padres lo que había sucedido realmente.

El Sr. XB, un médico, reveló que el jefe del Departamento de genética del hospital de Bordeaux ordenó que los bebés abortados durante el tercer trimestre permaneciesen vivos después del aborto, para que el tejido de su cerebro estuviese intacto y fresco para su estudio. Cuando XB dejó el hospital, habló con una enfermera y expresó su aversión del infanticidio:

Todavía veo a esta joven [enfermera] mirar al vacío diciendo: «es cierto que a veces, ocurren asesinatos aquí»… A continuación me contó una vez que el bebé tuvo tiempo de gritar antes de ser transportado rápidamente a otra habitación. Estos casos no son raros, pero son dramáticos, porque la madre oyó a su hijo, y en el momento en que se dió cuenta de que estaba vivo, el niño estaba siendo asesinado… Lo que perturbó a la enfermera, fue que los tres médicos (obstetra, un anestesiólogo y un pediatra) tomaron una hora para matar al recién nacido. Porque, puesto que él estaba vivo, el niño luchó vigorosamente, y no podría administrar la inyección letal.

Testimonio de la Sra. L.M., una ex enfermera anestésica:

Quiero dar testimonio de un infanticidio: no sólo matamos a un recién nacido de 28 semanas, hemos hecho algo aún peor: no tuvimos la humanidad para acudir en su ayuda… La joven madre era adicta a las drogas y seropositiva y había descubierto su embarazo relativamente tarde. Los ginecólogos la persuadieron de abortar, pero el bebé nació vivo. Las parteras lo colocaron simplemente en una caja vacía, totalmente desnudo, en un contenedor de acero inoxidable, sin nada para cubrirlo y sin atención alguna. Su madre estaba consciente durante el parto: lloraba y quería ver a su pequeño, pero los médicos decidieron que este niño debía morir. No se lo dieron a la madre para salvarlo. Este bebé era viable, respiraba solo y lloraba vigorosamente. Sinceramente creo que lo dejaron morir de frío. ¿Por que se lucha por algunos bebés prematuros y se dejan morir a otros bebés sin humanidad alguna?

…

Tengo horribles recuerdos de mi tiempo en la sala de Ginecología, lugar en donde he asistido a abortos tardíos. Los fetos tenían cerca de 16 semanas, y muchos de ellos luchaban y trataban de respirar de 5 a 15 minutos. Ya que no existe ninguna ley sobre lo que debe hacerse con un feto que está luchando por su vida, se deja al feto solo en un recipiente redondo o un tazón de fuente para que muera… Esto no es un acontecimiento inusual. Aproximadamente el 25% de los bebés de 16-17 semanas viven unos instantes antes de morir.

La Sra. Andrea Kischkel, médico del Hospital de Gällivare en Suecia, informó esto:

Una niña nació viva el 01 de marzo del 2014 a las 19:55. No se les permitió contactar al pediatra que estaba de guardia. Así, la niña no recibió medicación alguna, ningún alivio para el dolor, aún cuando había sido retirada del vientre de su madre por succión. Una partera envolvió al bebé en mantas calientes y esperó hasta que muriera, casi media hora más tarde.

Varios testimonios más se encuentran en el informe completo del Centro Europeo de Derecho y Justicia