El médico y las 2 enfermeras son acusados de homicidio involuntario.
No hay medios de comunicación internacionales que hablan de esto, sin embargo la muerte de Aisha Chitchira, una mujer de 32 años nacida en Malawi residente de Dublín, Irlanda, vivía con su marido, contaba con la visa de estudiante en este país. Ella tenía 22 semanas de embarazo, Aisha Chitchira viajó a Londres para abortar en una clínica Marie Stopes (Marie Stopes International es una organización que realiza abortos alrededor del mundo y se beneficia de los fondos monetarios europeos, según lo revelado por la iniciativa de Nouevelles de France). Abortó el 21 de enero de 2012, se sentía mal sin embargo fue dada de alta de la clínica. Después de tomar un taxi fue a visitar a una amiga ahí sufrió una hemorragia interna seguida de un paro cardíaco. Una ambulancia fue llamada pero Aisha Chitchira no pudo ser reanimada.
El vínculo entre el aborto y la muerte del paciente es evidente, mientras que en el caso de Savita Halappanavar, contrariamente a lo que han afirmado los medios de comunicación, no tuvo ningún vínculo establecido entre el rechazo del aborto y la muerte del paciente. (…)
Noticia Nouvelles de France traducción y edición libre CM.